


JUSTIFICACIÓN:
Hace poco más de un mes estuve una semana internado para someterme a una operación de vesícula (¿sabían que Warhol murió en el transcurso de una? ¡Pobre! ¿Hay algo menos glamoroso para una diva pop –y Andy lo era- que “espichar” en una intervención quirúrgica de “rutina”?). Como estaba medicado, ergo sin dolor, me dediqué a anotar algunas cosillas en un cuaderno que compré dentro del hospital. Las que siguen son algunas impresiones de mis días de impaciencia.
11 DE OCTUBRE
Presididos por el aburrimiento (¡qué ampuloso suena!) transcurren mis días en este sitio. Sí, me aburro muuucho. Aunque, ahora que lo pienso, relativamente menos de lo que debería. Supongo que la fluoxetina trabaja a buen ritmo. Léase: sostiene mi curiosidad, pues si bien se mira en un hospital ocurren cosas: la comida (hay que ver las caritas de alegría de los pacientes cuando se aproxima el carrito de los alimentos), este cuaderno nuevo, gente que abandona el lugar sobre sus piernas, gente que lo abandona con las patas pa delante (A propósito: hoy descubrí que la salida de “fiambres” está oculta en la parte trasera del edificio ¿evitan las deserciones masivas?).
Noche:
SE EQUIVOCÓ PAVESE
“Vendrá la muerte y tendrá…¡agujas!
12 DE OCTUBRE
TOTALIDADES
Si en nuestro país el fútbol lo es todo, y Maradona lo es todo para el fútbol, la deificación es un hecho. También el odio a un dios que no cumple con todos –pero todos- los deseos de todos –pero todos, absolutamente todos- los fieles del culto.
HOMBRES NINIOS
Vemos un par de fragmentos de pelis por las que circulan asesinos seriales, gnomos macabros, chicas pulposas que parecen travestis. Y mis compañeros de habitación y sus acompañantes, a juzgar por sus comentarios y carcajadas, lo disfrutan enormemente.
Mi descubrimiento: el público de estos filmes es el de los “hombre ninios”
13 DE OCTUBRE
EUFEMISMO
Esta mañana sólo la belleza física me “consuela”.
Hace poco más de un mes estuve una semana internado para someterme a una operación de vesícula (¿sabían que Warhol murió en el transcurso de una? ¡Pobre! ¿Hay algo menos glamoroso para una diva pop –y Andy lo era- que “espichar” en una intervención quirúrgica de “rutina”?). Como estaba medicado, ergo sin dolor, me dediqué a anotar algunas cosillas en un cuaderno que compré dentro del hospital. Las que siguen son algunas impresiones de mis días de impaciencia.
11 DE OCTUBRE
Presididos por el aburrimiento (¡qué ampuloso suena!) transcurren mis días en este sitio. Sí, me aburro muuucho. Aunque, ahora que lo pienso, relativamente menos de lo que debería. Supongo que la fluoxetina trabaja a buen ritmo. Léase: sostiene mi curiosidad, pues si bien se mira en un hospital ocurren cosas: la comida (hay que ver las caritas de alegría de los pacientes cuando se aproxima el carrito de los alimentos), este cuaderno nuevo, gente que abandona el lugar sobre sus piernas, gente que lo abandona con las patas pa delante (A propósito: hoy descubrí que la salida de “fiambres” está oculta en la parte trasera del edificio ¿evitan las deserciones masivas?).
Noche:
SE EQUIVOCÓ PAVESE
“Vendrá la muerte y tendrá…¡agujas!
12 DE OCTUBRE
TOTALIDADES
Si en nuestro país el fútbol lo es todo, y Maradona lo es todo para el fútbol, la deificación es un hecho. También el odio a un dios que no cumple con todos –pero todos- los deseos de todos –pero todos, absolutamente todos- los fieles del culto.
HOMBRES NINIOS
Vemos un par de fragmentos de pelis por las que circulan asesinos seriales, gnomos macabros, chicas pulposas que parecen travestis. Y mis compañeros de habitación y sus acompañantes, a juzgar por sus comentarios y carcajadas, lo disfrutan enormemente.
Mi descubrimiento: el público de estos filmes es el de los “hombre ninios”
13 DE OCTUBRE
EUFEMISMO
Esta mañana sólo la belleza física me “consuela”.
ME COMÍ LA(S) GALLETITA(S)
Ayer, y luego de dos interminables días de “dieta cero”, me permitieron por fin tomar caldo y té acompañados por galletas de agua. Esa fue la señal de largada de una nueva adicción: pocas tentaciones he conocido más fuertes que la del paquete en la mesa de luz. Una galleta que es la última –siempre la última-, precede a otra que, por supuesto, también lo es. Y así sucesivamente. Si no fuera por el temor de perturbar el sueño de mi compañero (hay que ver lo “chillones” que son esos envases) me hubiera convertido en una de esas termitas de los dibujos animados y no sólo habría acabado con el paquete completo sino también con mi muy precaria salud.
EVANGÉLICOS
Joven evangelista mendocino (para más datos, palmirense): -¿Tú sabes que tienes un amigo que quiere lo mejor para ti, un amigo que dio su vida por ti?
Yo: -Ahhhhhh
(Para Hernán: los evangelistas no dudan: tutean cual salidos de una telenovela de Thalía)
14 DE OCTUBRE
LAMENTOS
Mis compañeros de habitación, los mayores, hablan de “LA MUJER” (la mujer esto, la mujer aquello) como si del motor de un 11/14 se tratara. El resultado, se entiende, no puede ser más torpe. Pues ¿hay algo menos “maquinal” –previsible- que una mujer?
(¡Ay de los muchachos que miran y atienden como si del oráculo de Delfos se tratara! ¡Ay de las mujeres que se enamoren de estos chicos!)
15 DE OCTUBRE
PEQUEÑA MALDAD
Muchacho evangelista, cuidador de mi compañero de habitación, intenta “devolverme al buen camino”. Para ello me lee un pasaje de la Biblia. Yo escucho. Luego digo que no entiendo, que me explique. Definitivamente la docencia no es lo suyo. Acaso, tampoco la religión.
CERTEZA
El cine argentino le adeuda un gran papel, un papel protagónico a Claudia Fontán.
CERTEZA II
Mañana me pasan por el cuchillo....
Mañana me pasan por el cuchillo....