reducirlo todo a ir tras unas manos:
esas, las dulces, delicadas artífices del sosiego (¿del cuerpo, del alma, del alma a través del cuerpo? ¡quién pudiera saberlo!);
en este punto, sobre todo, parece imprescindible no ceder a la tentación de husmear en su gracia, que quizá esté tejida de esa ignorancia y la preserve.
Sin embargo, pese a estas limitaciones de nuestro entendimiento, vislumbramos que son ellas las depositarias de la respuesta:
ellas, las flexibles, las huidizas, las que en ciertas circunstancias de tan materiales se vuelven etéreas;
esas manos de las que nada sabemos y de las que apenas sospechamos y de las que sólo obtenemos, un dulce sosiego.
8 comentarios:
Corazon las manos pueden obrar milagros en nosotros,sobre todo aquellas que saben tocar,y mira que las hay!!y tambien hay momentos,en que solo necesitamos ESO,unas manos que puedan atravezar la piel y acariciarnos tibiamente el alma.Si lo sabremos no???
Las manos a veces cobran vida corazón, se encapan de nosotros buscando ESE gran lugar para refugiarse, aunque nuestra consciencia no esté de acuerdo, aunque ella sepa que ÉSO será lo que mañana nos derrumbará.
Tú sabes mejor que yo el rumbo que toman las manos, jajajajaja.
Qué andes bien.
Besos Tía.
Mano a mano, te digo cómo viene la mano y la verdad es que está pesada. Sin embargo, quiero trenzar mis dedos con ese sosiego al que te referís. Tal vez así, comience el deshielo de mis manos.
Hablando de divas en mi blog... ¿Usted ya se retiró a cuarteles de invierno que no contesta?
Quebrantapajaros: ud sabe que de diva, nada. Lo que sucedió es que no he estado muy bien de salud (hay necesidad de contar estas cosas? no, pero lo mismo lo hago) y mi retiro ha sido más tecnológico que otra cosa, digo, en Medrano no hay muchos ciberantros (como dice fragaria)
Hola Sergio...
Ante todo gracias por tus comentarios en mi blog... gracias!
He estado chusmeando el tuyo... muy buena forma de escribir... muy interesante y atrapante al mismo tiempo...
Prometo estar visitandote con mayor asiduidad.
Bexos
Ad
Queridos lectores (o de cómo me volví pretencioso) : si este blog no ha tenido últimamente demasiada vida es porque yo no la he tenido. Digo, me agarró un bicho y me tiró tres días a la cama (espero que pasen de los chistes fáciles) y cinco en mi casa. Y lo peor es que hasta las ganas de escribir se llevó. Pero ya tengo algo in mente que postearé mañana o pasado.
Un poeta erótico! supongo que no hay mayor deseo. tener cerca, estar cerca de aquello que no se tiene...se suspira porque algo falta???
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