3 de septiembre de 2010

APRENDIENDO A VIVIR


si cuando la luz la alcanza
como a gran diva la envuelve
se esfuman cocinas jardines trabajos
espejos multas gobiernos se esfuman
¿por qué tan a menudo entonces
nos ahogamos en los vasitos de la tontería?

quizá la familiaridad de su trato
tallara en mi frente
el ceño compungido del pensador antiguo
pero a cambio obtendría
de la situación un cuadro preciso

y mirar de frente a la dama oscura
calcular las desgracias que carga en su maleta
sea acaso una de las más altas
una de las pocas formas de la inteligencia

8 comentarios:

Maria Eugenia dijo...

Muy lindo poema, iré de a poco leyendo tu blog, al cual llegué casualmente.
un beso

Proyecto Maria Castaña dijo...

Me fascinó esa nueva imagen de la muerte que creás como la de una mítica diva de Hollywood: una Greta, una Gloria una Rita, entallada en un vestido drapeado de satén negro. ¿Miramos de frente el misterio? Nunca, es mejor taparse con las el vaivén de tonterías diarias.

Hernán Schillagi dijo...

Sergio: ¡qué bien que "me" usó los subjuntivos! Juana lo aceptaría en su mesa.

Por otro lado, es un cagazo interesante ése de mirar de frente a la Parca. Pero nos nos queda otra, quizá el miedo (lógico, por cierto) sea el verdadero triunfo de la muerte.

En "Los días de la sombra", la gran Liliana Bodoc propone entender a la muerte en su función de podadora. Es decir, algo muere para darle paso a un ciclo que devendrá otra vez en vida (no entidad como reencarnación, por favor).

Eso sí, qué sexista pensar que la muerte es siempre una "dama". Podría ser también un hombre o una mina con calle (Subiela, not dead :-P)

sergio dijo...

Aventurera (hay que serlo para saltar de un tren): muchas gracias por el comment.

sergio dijo...

Mirar el misterio de frente.... me gusta esa idea. Me gustaría ser más valiente, hacer de la muerte una presencia estimulante. O sea, tener siempre muy claro que hoy, ayer, antes de ayer todo puede pudo terminar y que esa idea me empuje hacia adelante.

sergio dijo...

Amigo: la verdad es que si relaciono a la muerte con el cine (como dice Paula), podría haber usado la imagen de Ibáñez Menta. Es cierto, el triunfo de la muerte es el miedo...anticipado. Por eso, uno debería tener presente la tragedia para ser, no más feliz pero sí más intenso. Digamos que es una idea que me ronda hace años, pero ya sabemos que soy medio lento. jajajajaja

Marisa Perez Alonso dijo...

Hola poeta: Esta composición meliflua hacia la muerte me pone de los pelos, porque me horroriza y a la vez me gusta. Me conmueve ese trato desafiante y valiente. De alguna manera sentí la misma impresión que cuando terminé de leer "El palacio de las bellas durmientes" de Y. Kawabata. (¿Lo leíste?)
Por cierto que me fue muy bien en mi clase con tu poema "Fantasías textuales". Gracias!!

Te invito a que visites mi blog si tenés un tiempito, marisaperezalonso.blogspot.com

sergio dijo...

Marisa: eso que te provocó mi texto es más o menos lo que me provoca la idea de la muerte: curiosidad y al mismo tiempo, horror!!!! (¿cagazo?)

Me alegra mucho que el texto te haya servido para el laburo. Si lo pienso me da vértigo. Digo, tener tantos lectores jóvenes da vértigo. Jajaja

Un abrazo.