21 de agosto de 2010

CONTRA LA EDUCACIÓN SENTIMENTAL TELEVISIVA




el humo del café
la noche tras los cristales
mudos testigos de las confidencias de dos
capaces de amenizar con su anecdotario bobo
120 minutos de conversación

luego sucede el ardor
el amor sucede luego

asunto tan corriente
no podía sino tener resultado corriente
personas comunes
en una historia singular
pero corriente

quisiera sin embargo decirte algo
decirte el siempre renovado estupor
de tu voz llegada del sueño
de tu voz llegada del trabajo
el estupor ante la inmensidad de esas regiones
que escapan a mi control
y cuyo relato no enmienda la herida
de saberte otro inaccesible

que aunque la muerte nos encuentre juntos
tu vida y tu muerte
no son
no serán
mi vida y mi muerte

4 comentarios:

Hernán Schillagi dijo...

Amigo: ud. está un poco perturbado en cuanto a los títulos?

Es verdad que "Hasta en las mejores familias..." no se entendía un pomo, pero poner "Poema" al poema, cuando el poema anterior se llamaba..."Poema"!

Volveré más tarde a ver si hay novedades :-)

sergio dijo...

la verdad es que el título anterior era un chistecillo muy hermético y por eso me decicí a cambiarlo. es un poema y entonces por eso se llama poema. de aquí en más creo que todos llevarán ese título. ud sabe que yo no escribo a partir de un título y entonces me cansa busca uno.
la cuestión es leyó el texto? le gustó? si, no ¿por qué? jajajajaja
fundamente en no menos de cinco renglones

Hernán Schillagi dijo...

Amigo: le tengo la solución! Ante una repetición inminente y tediosa, ud. tiene abajo de la plantilla para crear un post la opción "secciones" o etiquetas". Ahí ponga poemas y que el título sea el primer verso o nada. Le parece?

Cuando, muy de vez en cuando, publique un ensayo como hace un par de semanas, le pone "ensayos" o lo que tenga ganas a la etiqueta.

En cuanto al poema, la primera estrofa me hizo acordar al escenario que plantea Bettina Ballarini en "La cantina del alba", pero aquí la cosa parece más íntima y hasta más sórdida.

Hablando de reiteraciones, bastante riesgoso el juego de la reiteración léxica "corriente", "decirte", etc., aunque queda bien y bastante musical.

Ud. lo ha dicho, es bastante hermético el poema a pesar de su aparente simpleza de lenguaje. Pero allí se puede vislumbrar, al menos, algo posible de compartir: dos personas, una pareja son siempre uno más uno. Y las uniones no pasan de ser algo efímero y hasta imposible: "la herida/
de saberte otro inaccesible..."

El poema está bueno, pero Ud. debe pensar que si publica en un blog, no es un simple archivo de Word. Supone remotamente un lector que, por más lúcido que sea, necesita de señales -como un título- para avazar en el hermoso, oscuro y húmedo túnel de la poesía.


Saludos a Charles Ingalls!

Pd: estoy preparando un ensayito sobre la importancia de los títulos en los poemas. Ya me hizo engranar!!! ;-)

Hernán Schillagi dijo...

Ahora sí!!! Si bien no me resuelve todas mis dudas, al menos me puedo agarrar del título: un fósforo para buscar las monedas que se cayeron en la noche.

El "happy end" ha sido tan dañino para los castigados corazones del pueblo. Uno piensa que el "para siempre" es posible, cuando en verdad asomás la cabeza y las calles están empedradas con juicios de divorcio.